excusas para dejar de fumar.

¿Motivos o excusas para no dejar de fumar? Algunos motivos que suelen darse y que no son los causantes en definitiva de que necesitemos ese cigarrillo consumiéndonos la vida son:

• Por la ansiedad asociada al síndrome de abstinencia debido a la retirada de nicotina: Este es un síntoma muy leve. Además se ha comprobado que a pesar de la terapia sustitutiva con parches y comprimidos de nicotina el éxito no aumenta.
• Por el propio placer de fumar. Esto tampoco es del todo cierto. Pensemos en un fumador que no tiene en ese momento la marca de tabaco que a él le gusta y solo queda una marca que no le gusta nada. Esta persona preferirá fumar lo que halla, cualquier cosa por desagradable que sea antes de quedarse sin fumar. Como se puede ver aquí el tema del placer y el disfrute no tiene nada que decir. Cualquier persona podría reconocer que hay muchas cosas que le gustan y de las que disfruta mientras las hace, pero sin embargo no presenta angustia si no puede hacerlas.
• Según algunas teorías psicológicas esta asociado con el inconsciente:
  • Según S. Freud es un retroceso a la imagen del niño “al pecho de su mamá”. Pero sabemos que no es así, lo habitual es comenzar a fumar para demostrar nuestra madures, que ya somos adultos independientes. A ningún adolescente se le ocurriría salir a la calle con un chupete en la boca. Se moriría de la vergüenza.
  • Otras corrientes proponen que se relaciona a la imagen de “macho”, que hecha humo y fuego por la nariz. Esto tampoco se sostiene ya que sería absurdo pensar en alguien con un cigarrillo encendido puesto en la oreja.
• Algunos afirman que es por hacer algo con las manos. Pero entonces deberíamos preguntarle ¿por qué encenderlo?.
• Otros dicen es por gusto de llevar algo en la boca. Pero entonces deberíamos preguntarle nuevamente ¿para qué lo enciende?.
• Por sentir como entra el humo por los pulmones. Pero esa es una sensación horrible que se denomina ahogo o asfixia.
• Otros dicen que lo hacen solo porque sus conocidos también lo hacen. En este punto hay que ser cuidados, no vaya a ser que a sus amigos les de por cortarse un pie cuando les duela y usted acabe cojo.
• La mayoría tras descartar estas razones que son más bien excusas que nos damos, concluyen en que: fumar es solo un hábito adquirido.